Somos una Congregación religiosa que apuesta por la calidad de sus centros y, junto con sus principios religiosos, buscan que las mujeres que golpean nuestras puertas vivan con la dignidad y la felicidad que merecen.
Garantizar la máxima calidad de vida para nuestras residentes y sus familias proporcionando una vivienda en la que mediante una serie de servicios y programas se satisfagan las necesidades de las usuarias.
Ser reconocidas como referente en el trabajo de atención a mujeres y como organización religiosa comprometida por garantizar una atención integral donde confluyan en el día a día los valores religiosos de la congregación con los aspectos técnicos, éticos y profesionales.
Tenemos presente que cada persona es diferente y precisa de un tratamiento individualizado para satisfacer sus necesidades.
Libertad
Garantizamos la libertad y los derechos básicos de las personas residentes, teniendo en cuenta que la persona con discapacidad es adulta y merecedora de todo el respeto.
Nuestros centros
Dedicados a la atención de mujeres: embarazadas o con hijos, con discapacidad intelectual y ancianas, con necesidades de apoyo en algunas áreas de la vida: personal, familiar, social, sanitaria.