ORIGEN

Residencia Javier surge en 1.963 ante la necesidad social de atender a una población femenina con unas características concretas: distintos grados de discapacidad intelectual en una población socialmente de riesgo, más familias de discapacitadas que demandan una educación religiosa. Esto generó una residencia de usuarias con diferentes capacidades y que provenían de ambientes muy variados. Actualmente la población que se atiende es muy heterogénea en todos aspectos.

Desde entonces y hasta hoy la Congregación RR. MM. Esclavas de la Virgen Dolorosa se ha dedicado a trabajar con estas personas pensando en todas sus necesidades y contextos vitales, tarea que exige la máxima sensibilidad, receptividad, cualificación, exquisitez y un conjunto de actitudes que no se improvisan sólo con buena voluntad.